10/23/2006

Blogueros bla... bla... bla

Bla, bla, bla, bla,……. Tengo o no tengo razón con que los blogeros no hacen mas que mirarse el ombligo. Y encima ahora está como los de la tele, que si este me dijo esto, que si me dijo lo otro, que si me creo un blog para decir cosas buenas de mi. No hay nada como tener tiempo y querer perderlo en gilipolleces (perdón en cosas de frikis). Truchón ahora publica esto y ya sería el colmo de la gilipollez.

10/22/2006

El hombre invisible

Cuando salgo de trabajar coincide con la salida del colegio, y me entretengo mirando a los yogurines que van por la calle.

Hace tres o cuatro años hubo un momento en que me pareció que ellas me miraban cuando venían hacia mí, y me puse contento. Eso duró hasta que me di cuénta de que no me miraban a mí, sino que miraban a través de mí.

Lo que me queda es ser el hombre invisible.

10/09/2006

Sobrinos

Mejor no tengan sobrinos. A mí uno de los míos ya me ha dado el tranque dos veces. Dos sábados que me he deslomado a hacerle de comer para la visita (incluida horrible incursión a Alcampo un sábado a las 15.00: a pesar de que no es principios de mes las cajas siguen abarrotadas a esa hora) y luego no aparece, y me lo tengo que comer yo todo. Que se joda.

La próxima vez, aunque venga, ni a una cerveza le invito. Qué egoístas son. Sólo vienen por el interés de hacer una consulta sentimental, y como ya no les hace falta la consulta porque en vez de darse el filete con la gordita friki, se tiraron a la niña pija con cara de besuga , pues ya, aunque tenga que ir al concierto de Sabina, pues no me paso por tu casa, tío, que me da pereza. En fin, él está gordo y calvo y viejo, y se acabará casando con una vaca danesa. Que se joda, repito.

Yo he ido rebajando poco a poco a mis sobrinos a la categoría de mierda-pinchá-nunpalo. Cuando son pequeños son lindos, pero a medida que crecen se convierten en un compendio de los defectos de sus padres. Máquinas egoístas de joderte la vida, es lo que son. Esta enfermedad de odiar a - y ocuparse de - los sobrinos, se combate teniendo hijos.

Supongo.

10/02/2006

La Cinta de caminar o correr

En el gimnasio veo a cada imbécil haciendo el panoli con la cinta que me veo en el deber de explicar al mundo cómo se debe usar tal artilugio.

La cinta tiene botón start y suelen tener dos opciones, para velocidad y para pendiente. Normalmente están marcados con + y -. Al darle al botón start empieza muy despacio y tu le tienes quedar al botón de + para que acelere. Ten cuidado y no le des muy seguido porque tarda en coger velocidad y cuando te das cuenta te dejas los piños en el panel de control. También hay un botón de stop que para la cinta pero no es muy recomendable porque suele bajar la velocidad de forma rápida. Cuando termines le vas dando al botón – de la velocidad hasta que se pare y después le das al stop para que se pare del todo. Suele haber una pinza para que te la trabes en la camisa por si te da un telele al caerte tire de un contacto y se desconecte automáticamente la cinta(aquí si hay una parada brusca). Un consejo, si estas caminando y se te cae la toalla no intentes recogerla hasta que termines y si quieres parar de caminar sin parar la cinta te sujetas en las barandas que tiene y pones los pies en las guías que suele haber a los lados de la cinta. Al reanudar la marcha baja un poco la velocidad antes de volver a caminar.